Al menos 200 familias desalojadas de cerro Chiquihuite deberán esperar para regresar a sus casas

El Subsecretario de Gobierno del Estado de México, Ricardo de la Cruz Musalem dijo que el regreso de cerca de 200 familias desalojadas por los derrumbes del cerro del Chiquihuite, aún no es prudente, a pesar de que ya terminó la obra de estabilización de la ladera.

El regreso será hasta que los especialistas del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) revisen los diagnósticos que hacen en el cerro para que se pueda definir qué casas pueden ser habitadas de nuevo.

“Hoy el riesgo está mitigado en el sitio donde se registró la caída de piedras de gran tonelaje, pero no quiere decir que no pueda ocurrir otro desgajamiento”, refirió.

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“El gobernador nos ha instruido que seamos meticulosos en este trabajo”, insistió.

“Hay algunas familias que han ido regresando, y nosotros desde la Coordinación Estatal de Protección Civil hemos hecho la recomendación de que no lo hagan hasta que haya condiciones. Pero también sabemos de la necesidad de la gente”, reconoció y afirmó que es complicado determinar cuántas familias han regresado a sus casas, luego de más de tres meses del desalojo.

Pese a las indicaciones de las autoridades, muchas personas empezaron a regresar a sus casas, porque no han encontrado otro sitio para vivir, además de que temen que sus viviendas sean saqueadas.

La reubicación de quienes habitaban la zona de mayor riesgo es un proyecto a mediano y largo plazo, detalló el subsecretario.

OSD