¡Fuera cadenas- Twitter

¡Fuera cadenas- Twitter

Twitter acaba de ser adquirido por el magnate y empresario Elon Musk por la cantidad de 44 mil millones de dólares. A lo largo de este año, Musk había publicado en su perfil de Twitter (Tuiter en Iberoamérica) que tenía la intención de adquirir esa red social. Creo que esto no sorprende, pues Musk ―quien es la persona más acaudalada del mundo― es un usuario muy ávido de esta red social; en lo personal, la intención de Musk me pareció casi como un capricho: querer ser dueño de algo que le gusta tanto.

En los pocos días que Tuiter lleva siendo propiedad de Musk, se han anunciado diversos cambios. Por ejemplo, Musk ya destituyó al consejo de administración de Tuiter, y se nombró a sí mismo como el director general de la red social. De igual manera, Musk despidió a Vijaya Gadde, quien fuere la directora legal de esa empresa, y encargada de haber bloqueado a Donald Trump después de los disturbios del 6 de enero de 2021 en el Congreso de Estados Unidos.

Musk ha sostenido que Tuiter “…has become the de-facto town square” (…se ha convertido en la plaza pública); esto es, Musk considera que Twitter es la plaza pública donde hoy se discuten los temas de mayor interés para la sociedad. Con motivo de ello, él señaló que traerá la libertad de expresión a esta red social, por lo que ya cambió las reglas de bloqueo de cuentas y anunció la creación de una especie de comité compuesto por personas con diversas formas de pensamiento que estará encargado del bloqueo de cuentas en Twitter. Su mayor de bandera al frente de Tuiter es la libertad de expresión, incluso, después de haberse anunciado su adquisición de Tuiter, publicó un tuit que decía: “The bird is freed” (el ave está libre) como clara referencia a que él vendría a liberar la libertad de expresión en Twitter. 

Lo que me llama la atención de esto es que Tuiter, si bien es grande por número de usuarios, está lejos de ser la que mayor impacto y trascendencia en ese ámbito (número de usuarios) tiene entre las diversas redes sociales. Twitter cuenta con 436 millones de usuarios, lo cual contrasta con otras redes como Facebook (casi 3 mil millones), Youtube (2.5 mil millones), Instagram (1.5 mil millones) o TikTok (mil millones). Lo que quiero señalar es que Tuiter, si bien cuenta con un número importante de usuarios, se queda pequeña ante el resto de redes sociales más populares. Por tanto, creo que es un tanto exagerado considerar que esta red social es “la plaza pública” para discusión de asuntos sociales. Yo, como usuario de esa red social he visto muy poca relación entre lo que se discute en Tuiter y lo que se materializa en la realidad.  

De igual manera, me parece poco democrático que una empresa que se dice respetar la libertad de expresión sea controlada por una sola persona sin que alguien lo vigile ni limite. Es decir, nada impediría que el día de mañana Musk destituya a ese comité encargado de imponer las sanciones a los usuarios de Tuiter; incluso, me sonaría bastante lógico que eso pase cuando el comité no bloquee a una persona que Musk desee bloquear. Si bien suenan bien sus ideas, en la práctica me parecen poco viables, especialmente por la propia estructura corporativa de esa empresa.

Independientemente de ello, la verdad dudo mucho que la libertad de expresión haya sido la mayor motivación de Musk para adquirir a Twitter. Si prestamos atención a algunas cosas que él mismo ha dicho, podremos darnos cuenta que su interés ―lo cual es lo más natural y lógico― es obtener ganancias económicas del uso de esa red social. En cuanto a números, Musk pagó más o menos la cantidad de $101 dólares por usuario de Twiter. Él ha dicho que la publicidad bien dirigida y bien creada para cada usuario es algo que puede mejorar la experiencia de cada usuario en Tuiter. También ha dicho que pretende hacer de “código abierto” el algoritmo que se emplea en Twitter para la dirección de publicidad a los usuarios. Además, su interés es la de obtener más usuarios en Tuiter, lo cual evidentemente conllevaría mayores posibilidades de vender espacios publicitarios. De todo esto, mi impresión es que Musk pretende hacer un buen negocio con Twitter ―lo cual, insisto, me parece completamente natural para un empresario como él―.

Creo que a Musk le va a salir barata la adquisición de Tuiter siempre y cuando logre ampliar el número de usuarios en esta red. A decir verdad, no creo que la libertad de expresión se vea beneficiada como él dice, pero sí logrará hacer buen negocio de esa red social. 

osd

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